Segundo y tercer ejercicios: esquemas de preparación

Con anterioridad al segundo y tercer ejercicios, y una vez sacadas las bolas que indican los temas que te han tocado, el Tribunal te concede unos 15 minutos de tiempo para realizar unos esquemas preparatorios. Durante este tiempo, es posible que algún miembro del Tribunal se quede en la Sala. También se quedará el bedel.

Dado que este tiempo es "de preparación", conviene saber utilizarlo bien de forma que juegue a nuestro favor. 

En primer lugar, hay que tener en cuenta que es un tiempo para ti, para tranquilizarte, situarte y prepararte para la exposición. No obstante, también es un tiempo muy necesario para planificar cómo vas a decir los temas, si vas a cortarlos un poco (porque te hayan tocado temas muy largos) o si vas a dejarlos como están. Por ello, no hay que confiarse y conviene comenzar a preparar los esquemas lo más pronto posible.

Dado que tienes 15 minutos de tiempo de preparación, puedes dedicar 3 minutos al esquema de cada tema. No obstante, y puesto que conviene ser precavidos (por si acaso), suelo recomendar hacer cada esquema en 2 minutos y medio y luego, en el tiempo extra, completar algún punto que haya quedado menos extenso o algún epígrafe que te parezca especialmente complicado. Puedes controlar el tiempo con el cronómetro y luego ponerlo de nuevo a cero para empezar la exposición.

La forma de realizar los esquema es muy personal. No obstante, podemos señalar los siguientes puntos básicos:

• Consigna en tus esquemas los correspondientes epígrafes para asegurarte de que no te olvidas ninguno.
• Señala los puntos que has de cubrir. Por ejemplo, "concepto", "características", "naturaleza jurídica", "procedimiento".
• Copia el número del artículo que has de decir.
• Copia las enumeraciones que debas hacer (al menos, un dibujo o una palabra que te recuerde el contenido del inciso).
• Haz cada esquema en un folio y sitúa dicho folio en la parte del programa donde vienen los epígrafes del tema. Así podrás pasar de un tema a otro sin perder tiempo buscando la página del programa donde viene el tema a exponer.

Personalmente, nunca he hecho esquemas antes de cantar el tema al preparador, y en consecuencia tuve que "practicar" como hacerlos. Recomiendo efectuar al menos un esquema de cada tema antes de hacer el examen para así ser rápidos y eficientes en la confección de los mismos y utilizar el tiempo de preparación a nuestro favor (para tranquilizarnos) y no en nuestra contra (para ponernos nerviosos porque el esquema no sale todo lo fluido que debería).

Os adjunto a continuación algunos de los esquemas que hice en los exámenes orales en el Tribunal Supremo, por si os sirven de guía. En general, para hacer los esquemas y puesto que sigo mi "método de las 4 carillas", dividía cada folio en 4 columnas y cada una de ellas correspondía a una carilla del tema. Veréis a continuación que mi esquema, básicamente, son los epígrafes y subepígrafes de mis temas, y simplemente tenía que completar los huecos en blanco (el famoso "fill in the blanks" de nuestros ejercicios de inglés escolares) en el momento de exponer el tema.

Esquema del tema 18 de Constitucional (El Estado autonómico). Como veis, sólo incluí en el esquema los dibuijitos correspondientes a las competencias del Estado y las CCAA. Dado el contenido del tema, estimé que era lo más adecuado para mí, puesto que del resto de cosas me acordaría sin necesidad de esquema.

Esquema del tema 19 de Procesal Civil (Medidas cautelares II). Observad que lo primero que pone es "VENIA", para que no se me olvidase decir "Con la venia del Tribunal..." antes de empezar la exposición. Observad también que me equivoqué anotando los números de artículos en la última carilla del esquema (cuarta columna) y tuve que corregir el error sobre la marcha en el momento del examen.

Esquema del tema 20 de Penal (Medidas de seguridad).

¿Y vosotros? ¿Tenéis algún truco para hacer los esquemas de preparación?

Estados de ánimo opositoriles: opositar es un acto de fe

Buenos días compis,

Como ya he reiterado en otras ocasiones, todo opositor pasa por una serie de fases a lo largo de su vida opositoril. Solemos empezar muy motivados ("¡me como los temas! ¡qué rápido avanzo! ¡a este ritmo habré acabo temario el mes que viene!") y después, conforme nuestros respectivos preparadores nos piden más temas nuevos o nos exigen más de repaso, vamos en declive ("uff ¿este tema me lo había estudiado? No me suena ni el título del primer epígrafe"). Esta fase de declive suele terminar en un esfuerzo sobrehumano por "arreglar las goteras".

"Las goteras" son esos temas que, aunque te hayas repasado mil veces, sigues sin saberte. Y si algún día, en el repaso correspondiente, descubres que (¡oh, milagro!) te los sabes, es porque habrá otro tema que habrá hecho aguas, convirtiéndose en tu próxima "gotera" a remediar. Creo que los estudiosos de Harvard deberían hacer un estudio sobre cuantos temas puede recordar la mente humana, porque yo creo que son menos de 320 y por tanto cuando te sabes uno más, también te sabes uno menos. 

Es por esto que siempre digo que opositar es un acto de fe. Implica tener fe en que podrás con todos los temas y con todos los repasos, de forma que, si bien no podrás sabértelos perfectos durante toda tu vida, por lo menos estarán lo suficientemente pasables el día del examen. Es un acto de fe porque cada mañana de esos 10 días o 2 semanas en los que hagas los últimos repasos de los 181 temas (primer oral) o 139 temas (segundo oral), cerrarás los ojos muy fuerte y pensarás "hoy sí, ya sí, estos temas me los sé", y cruzarás los dedos para que así sea. ¡Y así será! De repente, un día, tras el enésimo repaso y sin saber muy bien por qué ocurre en ese momento, te sabrás los temas. ¡Parecerá que ocurre como por arte de magia! Y aprobarás.

Hay que tener fe. Si estudias, aprobarás. ¡Y recuerda no rendirte cuando estés tan cerca de la meta!

¿Y vosotros? ¿Qué pensáis? ¿También sentís que lucháis constantemente contra las goteras?

Segundo y tercer ejercicios de la oposición: puesta en escena

El segundo y tercer ejercicios de la oposición son orales y siguen la misma estructura, por lo que la información relativa a los mismos se condensa en una misma sección.

Información general. El segundo ejercicio de la oposición consiste en un examen oral en el cual las personas aspirantes expondrán 5 temas extraídos a la suerte de cada una de las siguientes materias del mencionado Temario y por este orden: un tema de Derecho Constitucional, dos temas de Derecho Civil (uno comprendido entre el número 1 y el número 49 y otro entre el número 50 y el número 96 del programa), y otros dos de Derecho Penal (uno comprendido entre el número 1 y el número 24 y otro entre el número 25 y el número 60 del programa). El tiempo total de exposición es de 60 minutos, no pudiendo concederse a cada tema más de 15 minutos (esto da una media de 12 minutos por tema). El tribunal puede otorgar 5 minutos de gracia si el contenido del examen así lo exige.

El segundo ejercicio se valora de 0 a 50 puntos. Se aprueba con un 25 o más.

El tercer ejercicio de la oposición consiste en un examen oral en el cual las personas aspirantes expondrán 5 temas extraídos a la suerte de cada una de las siguientes materias del temario y por este orden: dos temas de Derecho Procesal Civil (uno comprendido entre los temas 1 al 29 y otro de los temas 30 al 56), un tema de Derecho Procesal Penal, un tema de Derecho Mercantil y un tema de Derecho Administrativo o Derecho Laboral. El tiempo total de exposición es de 60 minutos, no pudiendo concederse a cada tema más de 15 minutos (esto da una media de 12 minutos por tema, aunque es aceptable, y así lo recomiendan la mayoría de los preparadores, conceder a las 3 primeras bolas (Procesal Civil y Penal) 13 ó 14 minutos y reducir el tiempo de exposición de las 2 últimas bolas (Mercantil y Administrativo-Laboral). Dado que no se prevén en la convocatoria los 5 minutos de gracia, hay que entender que en este ejercicio no se dan.

El tercer ejercicio se valora de 0 a 50 puntos. Se aprueba con un 25 o más.

La suma de las calificaciones obtenidas en los ejercicios segundo y tercero constituirá la puntuación global obtenida por cada persona opositora.

Puesta en escena. Cuando hablo de la "puesta en escena", hago referencia a una serie de trámites previos al momento de cantar los temas propiamente dicho. Es necesario estar familiarizado con estos trámites previos para perderle el miedo al examen y no dejar que la situación nos supere.

El examen es en el Tribunal Supremo, calle Marqués de la Ensenada, número 1. Eso significa que no se entra por la puerta principal (que es la que da a la Plaza de la Villa de París) sino por una puerta lateral. Lo primero que hay que hacer es pasar el control dela Policía Nacional y enseñarles el DNI. Ellos comprueban que estás en la lista de opositores y te dan una acreditación en la que pone “E” (supongo que significará “Examinado”). A tu acompañante también le piden el DNI y le dan una acreditación en la que pone “V” (“Visitante”, supongo). La acreditación te la tienes que colgar de la ropa.

A continuación el agente de Policía te indica cómo llegar a la Sala que te toque, dependiendo de tu Tribunal. Cuando llegas a la Sala, verás al bedel, que está fuera en una pequeña mesa con su silla. Te vuelve a pedir el DNI y apunta en la hoja de opositores que estás presente. Dependiendo del bedel, es posible que te muestre la Sala y te explique un poco el procedimiento a seguir una vez entres en la misma. En la Sala hay una mesa y una silla para ti, muchos folios en blanco, el programa en letra grande y clara y encuadernado, dos bolígrafos (aunque puedes llevarte el tuyo), una jarra o botella de agua y vasitos de plástico. También hay un micrófono, aunque a mí no me dijeron que lo encendiera.

Sala del Tribunal Supremo donde los opositores se examinan

Entonces esperas a que te toque. Si eres el primer convocado, a las 16:15 el bedel te llama para que entres. Si vas después de otro compañero, en cuanto dicho compañero acaba su exposición, el Presidente suena la campanilla y le dice al bedel que llame al siguiente, y entonces el bedel te llama y entras.

Una vez dentro, le das el DNI al Secretario. Éste lo conserva hasta el final del examen y luego te lo devuelve. Te dice que saques las bolas. Para ello, hay 5 bolsitas, una por cada bola, y las “bolas” no son como canicas, sino de contorno redondo pero planas (es decir, si se te caen no salen rodando, que no cunda el pánico). Se las vas dando al Secretario y él apunta en un papel los temas que te tocan.

El Secretario te da el papel con los números que te han tocado apuntados, y te sientas en la mesa. Miras el programa y el Presidente te pregunta si quieres cambiar alguna bola. Si quieres cambiar alguna, te vuelves a levantar y a coger otra bola de la misma bolsita de la que hayas sacado la anterior.

Entonces tienes los 15 minutos de esquemas. Durante los mismos, se quedará alguien en la Sala, o bien del Tribunal o el bedel. Es posible que se queden varios miembros del Tribunal y que hablen entre sí, pero bastante bajito, con la tensión ni te enteras. Puedes leer recomendaciones sobre cómo hacer el esquema en la entrada "Segundo y tercer ejercicios: esquemas de preparación".

Cuando han pasado los 15 minutos, el Presidente le dice al bedel que llame a audiencia pública. El bedel grita “audiencia pública” y entra en la Sala quien quiera. A continuación, el Presidente te invita a comenzar la exposición. Puedes leer recomendaciones sobre cómo exponer en el Tribunal Supremo en la entrada "Segundo y tercer ejercicios: exposición oral".

Qué hay que llevar. Oficialmente, basta con llevar el DNI. Extraoficialmente, lo normal es llevar el cronómetro y, si el opositor quiere, otro cronómetro o reloj adicional. Además, puedes llevar tu propio bolígrafo si lo deseas.

Cómo hay que ir vestido. A diferencia del test, en los ejercicios orales tiene mucha importancia tu presencia y forma de actuar. Lógicamente, te aprueban por lo mejor o peor que sea tu exposición, pero si das una buena impresión a través de tu imagen, tienes puntos ganados a tu favor. Por tanto, se recomienda que los chicos vayan en traje de chaqueta, y las chicas o bien en traje de chaqueta o con otro atuendo igualmente formal.

Estados de ánimo opositoriles: el mundo no gira... para el opositor

Buenos días compis,

Hoy os traigo el secreto de por qué opositar es algo tan desesperante: 

El mundo no gira para nosotros, pero sí para el resto de la gente.

Nuestra vida, mientras opositamos, está como en estado de espera. No podemos hacer planes de futuro, ni inmediato ("¿Saldrás el jueves a cenar con nosotros?" "No sé, depende de cómo vaya con los temas, porque tengo preparador el viernes"), ni cercano ("¿Te vienes de crucero en agosto?" "No sé, porque si apruebo el primer oral tendré que estudiar en verano para el segundo"), ni remoto ("¿Compramos un piso?" "No sé si podré permitírmelo"). Nos gustaría que el resto de la gente "nos esperara". Es como si el mundo estuviese girando, nos hubiésemos bajado de él y estuviésemos viéndolo girar desde fuera, esperando que nos pongan una escalera y nos dejen subirnos de nuevo.

Es una situación muy frustrante, porque el mundo y los que están en él, por mucho que te adoren y quieran facilitarte el período opositoril, no pueden esperarte indefinidamente. Su vida debe avanzar. La oposición se convierte así en una especie de limbo: no eres aún nada y por tanto nada puedes planear, pero tienes expectativas de serlo y poder hacerlo.

¿Qué podemos hacer para no sentir que vivimos en "el limbo"? Podemos esforzarnos por hacer pequeños planes. Así, planear algún viaje, acudir a alguna quedada de opositores u otros planes similares pueden ayudarnos a conocer gente, hacer cosas nuevas y sentir, en definitiva, que nuestra vida avanza, aunque sea a pequeños pasitos. No sabemos cuánto vamos a vivir en esta especie de limbo y nos corresponde a nosotros mismos hacer la estancia lo más agradable posible.

Por otra parte, también nos corresponde hacer que nuestra estancia en "el limbo" sea lo menos traumática posible para los que están a nuestro alrededor. Hay que comprender que, si los amigos no te llaman un fin de semana, no es porque pasen de ti, sino porque tienen vidas muy ajetreadas (mundos que sí giran) y no pueden estar pendientes de todo y todos todo el tiempo. Hay que ser comprensivo. Escuchar cómo su mundo sí gira también puede ayudarnos, en cierto modo, a sentirnos parte de él; y definitivamente escucharles también les ayudará a ellos.

¿Y vosotros? ¿Qué pequeños pasos tomáis para sentir que vuestro mundo sigue girando?

Primer ejercicio de la oposición: instrucciones generales

A la hora de hacer el primer ejercicio de la oposición o examen tipo test, hay una serie de recomendaciones que podemos tener en cuenta. 

Regulación en la convocatoria. Asegúrate de leer la Base G) de la convocatoria o, al menos, el resumen que de ella hago en la entrada "Qué hacer cuando sale la convocatoria: trámites a cumplimentar".

Qué hay que llevar. En la convocatoria de 2013, la Comisión publicó en la página web del CGPJ un "anuncio de la fecha y lugares en que tendrá lugar el primer ejercicio" en el que se indicaba lo siguiente:

"Los aspirantes admitidos y no dispensados comparecerán el día 21 de abril de 2013, para llevar a cabo el primer ejercicio de la oposición que tendrá lugar de forma simultánea en Barcelona, Granada, Madrid y Valladolid, en las sedes y según el reparto de opositores que se indica en el anexo III. El llamamiento de aspirantes se efectuará a las 10:00 horas y el examen dará comienzo a las 11:00 horas. Los candidatos acudirán provistos del Documento Nacional de Identidad y de bolígrafo con trazo de color azul o negro, no permitiéndose el acceso a las aulas en que se realizará el examen con teléfono móvil o con cualquier otro dispositivo electrónico.

Por tanto, y tomando este anuncio correspondiente a la convocatoria 2013 como guía del correspondiente a la convocatoria 2014, oficialmente hay que llevar DNI y bolígrafo azul o negro. El teléfono móvil puedes dejárselo a tus acompañantes, si vas con alguno, o a las propias personas que vigilan el examen, que lo dejarán en su mesa con un post-it indicativo de a quién pertenece.

Extraoficialmente, la mayoría de los opositores llevan un reloj para controlar el tiempo, un lápiz para hacer anotaciones en las preguntas y algún refresco o gominola para matar el hambre (y evitar bajadas de azúcar). También hay quien se lleva los apuntes para un último repaso.

NOTA: Entrarás a la sala entre las 10 y las 10:15, y desde ahí hasta las 11 que empieza el examen no tendrás nada que hacer. Habla con los compañeros de mesa y te sentirás más relajado.

Cómo hay que ir vestido. Es indiferente, porque en el test sólo se valoran tus respuestas y no tu presencia o modo de actuar. Conviene, lógicamente, ir medianamente arreglado pero sobre todo cómodo.

Instrucciones para la realización del examen. Te darán una hoja de preguntas y una hoja de respuestas. En la hoja de preguntas puedes subrayar, hacer dibujitos o cualquier otra señal. En la hoja de respuestas sólo puedes consignar las respuestas correspondientes.

Por lo demás, sirvan aquí las mismas recomendaciones que ya hicimos en la entrada "primer ejercicio de la oposición: cómo prepararlo" y que procedo a copiar de nuevo:

• Lee detenidamente el enunciado de la pregunta y las posibles respuestas, y subraya los elementos que pueden dar lugar a confusión. Por ejemplo, "Señala la respuesta incorrecta:"; "Las causas de indignidad siempre..."; "El heredero nunca...", etcétera.
• En lugar de buscar la respuesta correcta, busca las respuestas erróneas. Si eres capaz de eliminar todas las respuestas erróneas y estás convencido de la veracidad de la respuesta restante, tienes la seguridad de que has contestado bien la pregunta. Por otra parte, si simplemente seleccionas la respuesta que crees correcta, pero no eres capaz de decir por qué el resto de respuestas son erróneas, es muy posible que tengas una falsa seguridad y estés equivocado.
• Haz una primera criba, eliminando las respuestas que sabes que son erróneas. Subraya el elemento por el que crees que lo son. Por ejemplo, "Según el artículo 87 de la Constitución, la iniciativa popular no procede: a) En materia tributaria, pero sí en cuanto a la prerrogativa de gracia."
• Si en esa primera criba eres capaz de eliminar 3 respuestas y sólo te queda una posible, ¡genial! Si no, trata de buscar más intensamente el error en una de las respuestas posibles. Si no eres capaz, deja esa pregunta para el final, que es cuando valorarás si merece la pena arriesgarse o no.
• Es necesario hacer un nuevo análisis de todo el test una vez terminado, intentando contestar de nuevo todas las preguntas sin estar vinculado por lo que hayas contestado anteriormente. De esta forma evitamos los errores básicos que luego nos dan tanta rabia.
• Recuerda que a veces la respuesta correcta no será correcta en términos absolutos, pero sí la más correcta de entre las que se ofrecen. Por ejemplo, "Son materias reservadas a ley orgánica: a) el desarrollo de los derechos y deberes de los ciudadanos del Título II; b) el ordenamiento de las instituciones básicas del Estado; c) la prerrogativa de gracia; d) el régimen electoral general". Las respuestas a), b) y c) son falsas, y la d) es verdadera, aunque no esté completa, luego la correcta es la d).
• Cuenta las preguntas contestadas y seguras, y después valora si te conviene o no arriesgarte. Para ello, no conviene hacer un razonamiento matemático sino lógico: piensa la nota sobre la que piensas que podría estar el corte (esto es dificilísimo, pero por ejemplo en 2013 los preparadores nos dijeron que intentáramos llegar a 80, aunque finalmente el corte estuvo en 74) y trata de tener un número de respuestas correctas que te permita pasarlo.
• Pasa las respuestas a la hoja de respuestas. ¡Cuidado! Los mayores errores están aquí. Para no equivocarte, revísalo de atrás hacia adelante y de nuevo de delante hacia detrás. Ten cuidado con las respuestas que dejas en blanco; verifica que efectivamente no has marcado nada.

Una vez terminado el examen, se entrega la hoja de respuestas y el opositor se queda con una de las copias y con la hoja de preguntas.

Hoja de preguntas del test de 2013

Hoja de respuestas del test de 2013 (mis respuestas están borradas)

Instrucciones al dorso de la hoja de respuestas

Trámites posteriores a la realización del examen. En los días posteriores al examen, se colgará en la página web del CGPJ la plantilla de respuestas. Cada opositor puede entonces verificar las que tiene bien y las que tiene mal. Posteriormente, se publicará también el acuerdo con la nota de corte, y más adelante, la lista de aprobados, abriéndose entonces el trámite de impugnaciones.

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Estados de ánimo opositoriles: el bucle de las quejas

Buenos días compis,

Hoy vamos a ser claros: opositar es el infierno. Uno puede sacar cosas buenas de ello ("lo que hago repercute en mí", "otros opositores me entienden", "cuando apruebe todo habrá merecido la pena"....) pero, en esencia, en ese pulso entre el opositor, por un lado; y sus Carperi, la convocatoria que no sale, las 50 plazas y las modificaciones legislativas, por otro; el opositor tiene todas las de perder. Está solo ante el peligro.

Si bien, en base a esto, tenemos razones más que suficientes para quejarnos, lo cierto es que hay que tener cuidado con lo que me ha dado por llamar "el bucle de las quejas".

"El bucle de las quejas" es la espiral de la muerte, el pozo de la desesperación del opositor. Consiste en quejarse sistemáticamente de todo. Veamos un ejemplo:

• Día X. "Odio el tema 82 de Civil, es súper genérico, ¡todo teorías!"
• Día X+1. "Odio el tema 89 de Civil, es súper específico, ¡todo Derecho positivo!"
• Día X+2. "Buff... el tema 5 de Procesal Civil es cortísimo... ¿Quién ha elaborado el temario? ¡Esto no hay quien lo extienda hasta 13-14 minutos!"
• Día X+3. "Buff... el tema 49 de Procesal Civil es larguísimo... ¿Quién ha elaborado el temario? ¡Esto no hay quien lo meta en tiempo!"
• Día X+4. "Hoy llueve y está nublado. Así no hay quien estudie"
• Día X+5. "Hoy hace tanto calor... así no hay quien estudie"

Etcétera, etcétera. Creo que todos podemos sentirnos identificados con alguna (o todas) de las anteriores afirmaciones. Si te ves expresándote con ellas durante varios días seguidos... necesitas ayuda profesional para salir del "bucle de las quejas".

Para ello, es esencial que sepas que tienes razón en todo. Opositar es el infierno, es mal, es peor. Pero tenemos que vivir con ello, así que hay que apretar los dientes y seguir adelante. Una solución para parar las quejas que yo encuentro muy útil es reírse de ello.

• ¿Que el tema 82 de Civil son todo teorías? Mejor, no tienes apenas nada que memorizar. Te lees la teoría y luego la repites con tus propias palabras. Si no te acuerdas, te la inventas razonadamente. 
• ¿Que el tema 89 de Civil es todo Derecho positivo? Mejor, ¡para un tema preciso que vas a poder cantar! Te ciñes a los artículos y listo, otro tema más para sacar una notaza en el examen.
• ¿Que el tema 5 de Procesal Civil es cortísimo? Qué alegría, ¡momento para meter paja! O para hablar más lento. O para regodearte en los entresijos del lenguaje mientras explicas algún punto.
• ¿Que el tema 49 de Procesal Civil es larguísimo? ¡Tijera! ¡A recortar! Qué felicidad, tachar párrafos, ignorar teorías doctrinales... quedarte con lo verdaderamente importante.
• ¿Que llueve? ¿Que está nublado? ¿Que hace sol? ¡Venga ya! ¿Qué excusa será la siguiente? ¿Que la mesa de la biblioteca es demasiado cuadrada?

Es difícil salir del bucle de las quejas, sobre todo porque la mayoría de las veces no queremos salir. Está bien quejarse un día entero, o una semana, pero al final habrá que salir a flote, como siempre. ¡Ánimo compis!

¿Qué otras quejas son comunes en los días malos? ¿Qué hacéis para no caer en este bucle?

Primer ejercicio de la oposición: preguntas derogadas de los tests oficiales

En esta entrada pretendo consignar las PREGUNTAS DEROGADAS de los tests oficiales de convocatorias de años anteriores. Son las siguientes:

2003. Pregunta 75.

2004. Preguntas 85 y 98. La pregunta 72, tras la modificación del Código Penal, tendría por respuesta correcta la c). La pregunta 100, tras la modificación del Código Penal, tendría por respuesta correcta la c).

2005. Preguntas 13 y 73.

2006. Preguntas 58, 63, 66 y 69.

2007. Preguntas 30, 69 y 74.

2008. Preguntas 67 y 72.

2009. Preguntas 58 y 90.

2010. Preguntas 74 y 78.

2011. Preguntas 35 y 72.

2013. No hay preguntas derogadas.

Además de estas preguntas derogadas, hay que tener en cuenta las PREGUNTAS ANULADAS en trámite de impugnaciones, que se indican en el propio documento de preguntas y respuestas puesto a disposición de los opositores por la Comisión de Selección. Son las siguientes:

2003. Pregunta 22.

2004. Preguntas 10 y 62.

2005. Pregunta 40.

2006. Preguntas 51 y 80.

2007. Preguntas 17 y 60.

2008. Preguntas 74, 76, 77, 79 y 93.

2009. Preguntas 1, 41, 46 y 72.

2010. Preguntas 12, 52 y 75.

2011. Preguntas 37, 62 y 83.

2013. Pregunta 19.

¿Entendéis que alguna otra pregunta está derogada? Hacédmelo saber para incluirla en la lista, por favor. ¡Gracias por ayudarme!

Primer ejercicio de la oposición: cómo prepararlo

Información general. El primer ejercicio de la oposición consiste en un examen tipo test de 100 preguntas con 4 respuestas alternativas de las cuales solo una es correcta, para el cual se dispone de 2 horas y 30 minutos de tiempo. Versa sobre las siguientes materias:

• Derecho Constitucional: 10 preguntas
• Derecho Civil: 40 preguntas
• Derecho Penal: 30 preguntas
• Derecho Procesal Civil: 13 preguntas
• Derecho Procesal Penal: 7 preguntas

El primer ejercicio se califica de 0 a 100 puntos. Las preguntas acertadas se valoran con 1,00 punto, las preguntas no acertadas descuentan 0,33 puntos y las preguntas no contestadas no son puntuadas.

Cómo prepararlo. La materia que se examina en el examen tipo test coincide con la de los orales, es decir, que si has estudiado los orales concienzudamente deberías ser capaz de aprobar el test. No es necesario ningún material adicional. Lo afirmo fehacientemente, porque circulan opiniones contrarias a esto y quiero daros seguridad: estudié solo y exclusivamente de mis apuntes y mi nota en el test es de las más altas de la convocatoria de 2013.

Para preparar el examen tipo test, contamos con los siguientes recursos:

• Exámenes de años anteriores. Son la mejor preparación para el primer ejercicio. Su único inconveniente es que algunas preguntas están derogadas. Puedes consultar las preguntas derogadas en la entrada correspondiente. Puedes descargar los exámenes de años anteriores aquí.
• Libros de tests (Carperi, Tirant lo Blanch). 
• Carperi tiene libros de tests por cada materia (Derecho Constitucional, 17€; Derecho Civil, 50€; Derecho Penal, 33€; Derecho Procesal Civil y Procesal Penal, 38€) y también un libro de tests general (55€). Si te suscribes a las actualizaciones generales de los temas, te mandan también las actualizaciones correspondientes a los libros de tests. Puedes consultar más información aquí.
• Tirant tiene un libro de tests generales (80€). Es del año 2004 y no está actualizado, luego puede haber preguntas derogadas. Puedes consultar más información aquí.
• Otros recursos:
• Tests del blog "El opositor a judicatura" de Derecho Constitucional (aquí), de Derecho Civil (aquí), de Derecho Penal (aquí). Son gratis.
• Puedes comprar 1.000 tests adaptados a la convocatoria de 2013 (20€, primero te dejan descargar una muestra) aquí.
• Puedes crear tus propios tests para practicar a través del programa DAYPO. Hay un tutorial aquí.

Para realizar un examen tipo test, conviene tener en cuenta las siguientes recomendaciones:

• Lee detenidamente el enunciado de la pregunta y las posibles respuestas, y subraya los elementos que pueden dar lugar a confusión. Por ejemplo, "Señala la respuesta incorrecta:"; "Las causas de indignidad siempre..."; "El heredero nunca...", etcétera.
• En lugar de buscar la respuesta correcta, busca las respuestas erróneas. Si eres capaz de eliminar todas las respuestas erróneas y estás convencido de la veracidad de la respuesta restante, tienes la seguridad de que has contestado bien la pregunta. Por otra parte, si simplemente seleccionas la respuesta que crees correcta, pero no eres capaz de decir por qué el resto de respuestas son erróneas, es muy posible que tengas una falsa seguridad y estés equivocado.
• Haz una primera criba, eliminando las respuestas que sabes que son erróneas. Subraya el elemento por el que crees que lo son. Por ejemplo, "Según el artículo 87 de la Constitución, la iniciativa popular no procede: a) En materia tributaria, pero sí en cuanto a la prerrogativa de gracia."
• Si en esa primera criba eres capaz de eliminar 3 respuestas y sólo te queda una posible, ¡genial! Si no, trata de buscar más intensamente el error en una de las respuestas posibles. Si no eres capaz, deja esa pregunta para el final, que es cuando valorarás si merece la pena arriesgarse o no.
• Es necesario hacer un nuevo análisis de todo el test una vez terminado, intentando contestar de nuevo todas las preguntas sin estar vinculado por lo que hayas contestado anteriormente. De esta forma evitamos los errores básicos que luego nos dan tanta rabia.
• Recuerda que a veces la respuesta correcta no será correcta en términos absolutos, pero sí la más correcta de entre las que se ofrecen. Por ejemplo, "Son materias reservadas a ley orgánica: a) el desarrollo de los derechos y deberes de los ciudadanos del Título II; b) el ordenamiento de las instituciones básicas del Estado; c) la prerrogativa de gracia; d) el régimen electoral general". Las respuestas a), b) y c) son falsas, y la d) es verdadera, aunque no esté completa, luego la correcta es la d).
• Cuenta las preguntas contestadas y seguras, y después valora si te conviene o no arriesgarte. Para ello, no conviene hacer un razonamiento matemático sino lógico: piensa la nota sobre la que piensas que podría estar el corte (esto es dificilísimo, pero por ejemplo en 2013 los preparadores nos dijeron que intentáramos llegar a 80, aunque finalmente el corte estuvo en 74) y trata de tener un número de respuestas correctas que te permita pasarlo.
• Pasa las respuestas a la hoja de respuestas. ¡Cuidado! Los mayores errores están aquí. Para no equivocarte, revísalo de atrás hacia adelante y de nuevo de delante hacia detrás. Ten cuidado con las respuestas que dejas en blanco; verifica que efectivamente no has marcado nada.

¿Y vosotros? ¿Qué otros recursos o recomendaciones consideráis útiles para preparar el examen tipo test?

Motivación: Fragmento ¿Qué es ganar? del libro "Correr o morir" de Kilian Jornet

Pero ¿qué es ganar? ¿Cual es la verdadera victoria? ¿Qué es lo que hace que al cruzar la línea de meta se me ericen los pelos, que note  flotar mis pies y que no puede evitar tener ganas de llorar, de gritar con todas mis fuerzas, de echarme a correr y al mismo tiempo tirarme al suelo? ¿Qué es lo que me  hace sentir esta burbuja?, la verdadera victoria no reside en cortar la cinta al cruzar la meta, no reside en subir al peldaño más alto del podio. Nada de eso puede hacer que te tiemblen las piernas de miedo y emoción. O en todo caso lo puede hacer al recordar lo que has vivido antes. La victoria, la real, es aquella que se encuentra en lo mas hondo de cada uno de nosotros. Es aquella que no nos creemos del todo que pueda llegar, a pesar de la preparación y la voluntad puestas, y que finalmente llega. Es como si, aunque de forma consciente y con la calculadora en mano, después de muchas horas de preparación, de muchos días de entrenamiento, de concienciarnos de que somos capaces de ganar, o simplemente de terminar la carrera, existiera algo en nuestro inconsciente que nos dijera constantemente que es imposible, que es demasiado bueno, demasiado grande, demasiado increíble para ser verdad. Que lo que deseamos lograr es solamente un sueño. Y al cruzar la meta, cuando echas la vista atrás y compruebas que es real, que eres de carne y hueso, y que lo que parecía posible solo en sueños se ha convertido en realidad, te das cuenta de que ésta es la verdadera victoria.

Ganar no significa terminar en primera posición. No significa batir a los demás. Ganar es vencerse a uno mismo. Vencer a nuestro cuerpo, nuestros límites y nuestros temores. Ganar significa superarse a uno mismo y convertir los sueños en realidad. En muchas carreras he terminado en primera posición pero no me he sentido ganador. Al cruzar la meta no he llorado, no he saltado de alegría y mis emociones no han sido una tormenta desbocada. Simplemente tenía que ganar la carrera, sabía, tenia la seguridad, que llegaría el primero. Sabia que no era un sueño, y en ningún momento mi mente llego a plantearse que sería el no vencer. Era fácil, como un cocinero que abre su restaurante por la mañana y sabe exactamente como le va a quedar el bistec. No hay ningún reto, ningún sueño del que despertarse al final. Y eso, por lo menos para mi, no es ganar. Al contrario, he visto a grandes ganadores, a personas que se han vencido a si mismas y que han cruzado la línea de llegada llorando, sin fuerzas, pero no por el agotamiento físico, que también, sino sobre todo por haber logrado terminar aquello que ellos sabían que en el fondo solo era fruto de sus sueños. He visto a gente sentarse al cruzar la meta de la UTMB y permanecer en esta posición durante horas con la mirada perdida, con la mayor de las sonrisas en sus adentros, sin creerse todavía que lo acaban de lograr no forma parte de un engaño de la mente. He visto a personas que, pese a llegar cuando los primeros ya se habían duchado, habían almorzado y quizás habían tenido tiempo de echarse una siesta, se sienten vencedores y no cambiarían lo que sienten por nada de lo que les pudieran ofrecer. Y los envidio, por que en el fondo ¿no corremos para eso? ¿Para saber que nosotros somos capaces de vencer nuestros miedos y que la cinta que cortamos al cruzar la meta no está sujetada por azafatas sino que está situada allá donde nuestros sueños quieren? ¿La victoria no consiste en ser capaces de poner nuestra mente al límite para descubrir que estos límites nos han llevado a descubrir nuevos límites? ¿Y empujar poco a poco nuestros sueños?

- Kilian Jornet, corredor de montaña